El declive de la democracia en América Latina - por Marita Carballo
Sólo el 48% de los latinoamericanos apoya la democracia, lo cual representa una disminución significativa.
Distintos estudios muestran que la democracia está en problemas y se presentan grandes desafíos en relación a su futuro. Este declive democrático es muy generalizado y comprende democracias maduras como Estados Unidos y países de la Unión Europea así como también a nuestra región Latinoamérica.
La encuesta Latinobarómetro realizada en 17 países entre febrero y abril de este año es la más exhaustiva y nos permite comparaciones desde 1995. El estudio evalúa la democracia utilizando un indicador compuesto por tres alternativas. La primera mide el “apoyo” la segunda la “indiferencia” y la tercera el “autoritarismo”. Se pregunta: “con cuál de las siguientes frases esta Ud. más de acuerdo”: 1) la democracia es preferible a cualquier otra forma de gobierno 2) en algunas circunstancias un gobierno autoritario puede ser preferible a uno democrático y 3) a la gente como uno nos da lo mismo un régimen democrático que uno no democrático.
Con relación al apoyo, en 2023 solo el 48% de los latinoamericanos apoya la democracia lo cual representa una disminución significativa desde el 63% registrado en 2010. El declive a partir de 2010 es sistemático a lo largo de más de una década y ello se explica por motivos estructurales que no han sido resueltos y que producen una profundización de la pérdida de apoyo.
La Argentina es el segundo país (62%) luego de Uruguay (70%) en apoyo de la democracia y ha aumentado desde 2020 siete puntos siendo 2023 un año electoral.
Con respecto a la indiferencia al tipo de régimen político: al igual que con el indicador de “apoyo a la democracia” es a partir de 2010 que comienza un cambio que se mantiene en el tiempo. En este caso es un aumento constante de la indiferencia, de un 16% en 2010 a 28% en 2018 y 2023. Argentina es el país con la menor cantidad de ciudadanos que son indiferentes al tipo de régimen (15%) sin variación desde 2020 pero el porcentaje que apoyan el autoritarismo es 18% con un aumento de cinco puntos porcentuales respecto de 2020 cuando alcanzaba 13%.
Los latinoamericanos mayores de 60 años son más democráticos que los jóvenes, a mayor educación mayor apoyo a la democracia y son más democráticas las clases medias. El tema de los más jóvenes es muy preocupante para el futuro de la democracia. Y queda claro que si no mejora la educación será difícil que se generen más demócratas.
La adhesión a lo que llamamos la democracia Churchiliana como “el mejor sistema de gobierno es del 66% en el promedio regional y en nuestro país del 80%, ocupando junto con el Salvador el segundo lugar. Uruguay ocupa el primer lugar con 85%. Analizando la tendencia en la región se reitera que la década de 2010- 2020 fue la peor década para el apoyo a la democracia.
Un indicador de suma importancia es la satisfacción con la democracia porque mide su desempeño. En la región en 2018 alcanza un mínimo histórico llegando a sólo 24% y, se ha recuperado algo al año 2023 alcanzando 28%. Argentina muestra al comienzo de la serie en 1995 que la satisfacción era de 51%. Alcanza su punto más bajo en el dramático 2002 con solo 8% de aprobación y el pico más alto en 2011 con 58% de satisfacción. Luego en 2017 se produce una caída de 20 puntos descendiendo a 37% los satisfechos al igual que en esta última medición.
Para medir el grado de populismo, la encuesta mide la adhesión a una serie de frases. La primera es: “No me importaría que un gobierno no democrático llegara al poder si resuelve los problemas”. Lo que vemos en los últimos veinte años es que este indicador aumenta de 44% a 54% entre 2002 y 2023. Los países del Cono Sur donde menos se apoya esta opción son Argentina (38%), Uruguay (40%) y Chile (41%).
Con respecto a la frase: “En caso de dificultades está bien que el presidente controle los medios de comunicación” este indicador ha aumentado en las últimos dos décadas, de 30% en 2002 a 36% en 2023, un aumento mucho menor al indicador anterior. En el caso de Argentina nuevamente el acuerdo con esta frase es menor (28%).
Con respecto a la frase: “No apoyaría en ninguna circunstancia un gobierno militar” observamos que en 2023 el 35% de los latinoamericanos apoyaría un gobierno militar. En Argentina el apoyo es menor (26%). Quienes más lo apoyarían son los paraguayos (64%) y los guatemaltecos (55%).
Y en relación al Poder Judicial existe un generalizado acuerdo en la región de que el mismo debe ser independiente del gobierno (70%) y los dos países que más fuertemente lo afirman son Uruguay (78%) y Argentina (77%).
El declive de la democracia en la región tiene múltiples causas como la no resolución de los problemas estructurales, la baja calidad de las elites, la corrupción y los ciclos económicos. La mayoría de los argentinos quiere la democracia y la prefiere a cualquier otra forma de gobierno, pero hay también gran insatisfacción con su funcionamiento y una minoría creciente, sostiene que en algunas circunstancias es preferible un gobierno autoritario.
En el contexto de la región, la Argentina aparece en una situación más positiva en su apoyo a la democracia que otros países. Pero también muestra a una dirigencia muy alejada de la gente con solo un 12% que cree que se gobierna para el bien del pueblo y un 84% que se gobierna para los grupos poderosos.
A su vez, en una región con grandes problemas económicos, la Argentina aparece como el país más crítico de todos tanto en relación a la situación económica presente con solo 5% que la evalúa de manera positiva y solo 10% que considera que mejoró en los últimos doce meses .
Respecto al futuro, un escaso 18% tiene expectativas de mejoría en el año venidero. Hemos vivido 40 años de democracia ininterrumpida, el más largo de nuestra historia, y esto es un avance, pero estamos frente a enormes desafíos que requerirán para ser resueltos del trabajo conjunto de toda la clase dirigente.
Por Marita Carballo, Presidente de Voices!